jueves, 9 de abril de 2015

¿Sabías que...?

Nuestros profesores y alumnos más antiguos compartieron algunas anécdotas sobre nuestro liceo en la Edición Aniversario (50 años) del Periódico Liceal "Construyendo", ahora nos toca a nosotros compartirlas con ustedes en este nuevo medio digital.

Nuestro liceo no siempre funcionó en el mismo edificio que hoy disfrutamos, en Tucumán y Armenia. Sus primeros días fueron en la Escuela Nro.52 “Elena Marroche de Mussio”.  También operó en otros lugares, algunos de ellos fueron: el Hotel Astoria, en Piria entre Chacabuco y Tucumán (hoy Casa Joven y Club de Leones), además de una casona  de las ventanas verdes ubicada en Avenida de Mayo, y que aún conserva el característico color de sus ventanas. Sin olvidar la casa de la familia Acosta, es decir de los queridos “Cacho” y “Pirula”, cita en Uruguay entre Ayacucho y Defensa.

El padre de nuestra Profesora de Inglés, Ana Laura López, en el año 1959 era profesor de matemática. Su nombre: José Emilio López. Por aquel entonces, el Prof. López trabajaba también como funcionario del Banco Pan de Azúcar. Fue ese mismo año cuando se produjo un robo en el mencionado banco y todos sus empleados quedaron detenidos como parte de la investigación. Este ex docente recuerda que tuvo que realizar la propuesta de examen, que sería dada a sus alumnos, desde el interior de la cárcel. Sin duda, este vecino de Piriápolis no olvidará nunca más una experiencia así.

Hacia 1969 el liceo contaba con el Grupo de Teatro Independiente “Florencio Sánchez, a cargo de la prof. Eda Barboza Sánchez de Loinaz, compuesto por estudiantes. Representaban la obra “M’hijo el Dotor”, con un gran despliegue en vestuario, escenarios, maquillaje y escenografía. Entre otros lugares, el grupo de teatro hizo una presentación en la reinauguración del Teatro Macció de San José. Se cuenta que Eda Barboza precisamente era sobrina de Florencio Sánchez.

Por esos tiempos también había una Revista Musical, donde participaban los alumnos del liceo. Realizaba bailes o coreografías de todo tipo (folklóricas, rock, Kasachoff, etc.). El grupo se presentó en varias localidades como La Paz, Maldonado, Tacuarembó y Mercedes. Un día, la Revista Musical fue invitada por el Colegio de las Hermanas Capuchinas de Maldonado. Cuentan que en la parte posterior del escenario, los cambiadores que las monjas les dieron a nuestros chicos eran muy pequeños. Luego que se retiraron las monjas, los chicos directamente quitaron las cortinas que separaban los cambiadores de damas de los de caballeros para tener más espacio, ¡provocando el escándalo entre las Hermanas del Colegio!

En 1970 en nuestro liceo había un jardín y todavía tenía árboles de eucalipto al frente. Famoso era un eucalipto centenario (plantado en los tiempos de Piria) que era enorme, ubicado al centro de dicho espacio. Muchos recuerdan a Manolito Beltrán, estudiante que venía al liceo en el camión de leña de su padre. Famoso hizo Manolito al camión, pues cuando llegaba se bajaba de él, no sin antes trancar la dirección con una barra dejando el motor encendido... ¡El camión quedaba dando vueltas y vueltas solo alrededor del eucalipto!